Identificar y tratar a los pacientes con hepatitis C que no están en las consultas de Hepatología a través de políticas activas de cribado en Atención Primaria es uno de los retos clave para avanzar en la lucha contra las hepatitis víricas en nuestro país. De ahí el papel tan importante que tienen los médicos de familia en el gran reto de eliminar las hepatitis víricas en nuestro país, y particularmente la hepatitis C.

Ofreciendo la realización de una prueba serológica a los grupos de riesgo e identificando signos y síntomas clínicos que puedan indicar la presencia de la infección por VHC aguda o crónica en pacientes que no pertenecen a ellos, los médicos de Atención Primaria puedan realizar una gran contribución en el objetivo de la eliminación de la hepatitis. Igualmente, juegan un papel fundamental en la información y educación a enfermos y familiares ante el riesgo de reinfección y/o contagio.

Pero para potenciar este papel es preciso que se tomen algunas medidas por parte de las administraciones. Así, desde la Alianza consideramos fundamental articular planes de cribado que cubran a las poblaciones de riesgo, y para ello es necesario que puedan realizarse pruebas de cribado en todos los centros sanitarios, por supuesto en Atención Primaria, e implementar el diagnóstico de la infección por VHC en un único paso. Actualmente, los médicos de familia no pueden hacer el diagnóstico, por lo que el paciente debe hacerse más pruebas para, posteriormente, ser remitido a un especialista que confirmará si este tiene hepatitis activa y, en el caso de tenerla, en qué estadio se encuentra y si es apto o no para acceder al tratamiento.

De todo ello, se habló en el 37 Congreso de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SemFYC), que reunió en Madrid a más de 2.500 médicos de familia, y brindó un magnífico marco para la presentación ante la Atención Primaria de los fines y miembros de nuestra Alianza, de la que forma parte la SemFYC.